jueves, 24 de septiembre de 2009

EL DIOS NUTRICIO (2ª DE 6)

LA CREACIÓN SE NARRA
COMO LA PREPARACIÓN DE UN BANQUETE DIVINO

"ÉL da alimento a todo viviente
porque es eterna su misericordia"
(Sal 135,25)

La obra creadora de Dios se presenta así como la preparación de un gran banquete: al tercer día prepara la mesa, luego ilumina el salón, después llama a la existencia a los invitados, les asigna sus lugares, al sexto día les da de comer y el séptimo se reposa en su compañía [Gn 1,11-13.29.31]. La creación es un proyecto eucarístico y apunta al banquete de la sabiduría, a la última cena y al banquete eterno.

Las Sagradas Escrituras nos muestran a Dios, desde los orígenes de la creación, como un Dios
1) nutricio,
2) comensal,
3) huésped y
4) anfitrión.

jueves, 17 de septiembre de 2009

EL DIOS NUTRICIO (1ª DE 6)

La meditación de los datos bíblicos puede
ayudar, aunque sola no sea suficiente,
para re-evangelizar los ritos alimenticios
que también han sufrido el embate
del materialismo y la secularización.
La nueva evangelización
también debe emprender la tarea
de reconstrucción cultural
y de re-ingeniería espiritual de las costumbres,
entre ellas las alimenticias.


"ÉL da alimento a todo viviente
porque es eterna su misericordia"
(Sal 135,25)

Recuperar el sentido religioso de las comidas

Propongo un recorrido estudioso-meditativo por textos de la Sagrada Escritura que tienen que ver con el tema bíblico de la comida y el alimento. pretendo sólo dar pautas y motivar para una "lectio" meditativa de estos temas en la Escritura.

Los textos que traigo a colación bosquejan, a partir de las Escrituras, un gran marco referencial del misterio eucarístico. Por otra parte, la meditación de estos textos permite asomarse a dimensiones profundas, mistéricas, de un acto que, como es el comer, se puede vivir en forma puramente biológica y profana o por el contrario, en forma humana, espiritual y religiosa; permite ubicarlo en sus dimensiones de koinonía: solidaridad humana, comunión religiosa y eucaristía cósmica. Por otra parte, dada nuestra distancia cultural, difícilmente nos imaginamos las vivencias religiosas y humanas que, en los tiempos y en la cultura en que vivió Jesús, iban asociadas al acto de compartir la mesa o de brindarla al huésped.

Pienso que estas meditaciones pueden servir sobre todo a los fieles creyentes,

lunes, 14 de septiembre de 2009

15 DE SETIEMBRE:
VIRGEN DOLOROSA

NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES

Querido visitante:

Lo invito a visitar el Blog del diácono Jorge Novoa, buen amigo a quien agradezco haber recordado y publicado en su Blog un triduo que prediqué alguna vez, en preparación a esta fiesta de la Virgen Dolorosa. Fue, para más detalle, en la Parroquia San Ignacio de Loyola, en Montevideo, invitado por el P. Pablo Touyá que en ese momento era su Párroco.

Ya me había olvidado y ahora lo releo como predicado por otro, no por mí. Eso me convence de la inspiración no era mía.

http://diaconojorge.blogspot.com/2009/09/rp-horacio-bojorge-sj-nuestra-senora-de.html


jueves, 10 de septiembre de 2009

MULTIPLICACIONES DE LOS PANES
¡HUBO! ¡NO SON CUENTO! 7ª

LAS MULTIPLICACIONES DE PANES
Y PESCADOS SALADOS
(7 de 7)
¡NECESARIAMENTE MILAGROSAS!

EL QUE NO LO CREA
QUE NO PREDIQUE
LO CONTRARIO
PORQUE DEMUELE LA IGLESIA
Y OFENDE AL FIEL CREYENTE




La hipótesis de la cena lluvia contradice datos positivos del texto

Ambas multiplicaciones suceden, como dice Marcos insistentemente, en 'un lugar solitario' (Mc 6,31.32.35; 8,4). Se afirma explícitamente que 'no tienen qué comer' (8,2) o se lo da a entender repitiendo dos veces que hay que ir a comprar alimentos a otro lugar (6,36.37).

Jesús ordena una investigación de las existencias de víveres (6,38; 8,5.7). En los relatos de los sinópticos son los apóstoles los que, ambas veces, ponen sus víveres a disposición. Es totalmente ajena a la visión de los sinópticos la idea de una 'requisa' de víveres entre los reunidos. Jesús ordena que sean los apóstoles los que les den de comer (Mt 14,16; Lc 9,13 9). Jesús siente y les dice que les toca a ellos aliviar la necesidad (Mt 15,32; Mc 8,2).

Sólo en el relato de Juan, aparece ese muchacho, posiblemente un discípulo, que comparte sus panes (Jn 6,9). Los sinópticos nada dicen de él. Y tampoco es la intención de Juan encarecer su generosidad, sino otro el motivo de mencionarlo.

jueves, 3 de septiembre de 2009

MULTIPLICACIÓN DE LOS PANES
¿HUBO O NO HUBO? 6ª

LAS MULTIPLICACIONES DE PANES Y PECES (6 de 7)

NECESARIAMENTE MILAGROSAS


La comida de Alianza de Pan y Sal (prosigue)

Es proverbial la hospitalidad oriental. Y es sabido que las comidas de hospitalidad crean un vínculo de alianza entre el que hospeda y el huésped. Un ejemplo arquetípico es el de Abraham hospedando a los tres misteriosos visitantes, de donde resulta una amistad tal que se pasa a compartir los proyectos y discutir los propósitos (Gen 18,1-33). En el episodio inmediato y conexo, Lot protege a sus huéspedes de la violencia que quieren hacerles los impíos habitantes de Sodoma (Gen 19,1-29). El huésped era sagrado, como el hogar en que estaba. Y aún después de su despedida, iba protegido por la ley de venganza de sangre, pues “llevaba en sus entrañas y en su sangre la sal de aquel que lo había hospedado”. Sería una impiedad inimaginable, sacrílega, espantosa, no sentirse atado por la hospitalidad brindada una vez.

En 1967 un campesino musulmán nos invitó, a entrar en su granja. Era en territorio de Jordania