viernes, 20 de septiembre de 2013

UNIDAD TEMÁTICA DEL SALTERIO [3 de 12]

Visión de un autor judío [2ª parte]

"El tema general del primer libro del Salterio es el del combate del justo contra el malvado"

3.3. “Los Salmos serán – sigue diciendo el autor judío que explica la unidad temática del Salterio - el desarrollo de estas ideas fundamentales contenidas en las últimas palabras de David. Es con justa razón que el Escriba colocó el Salterio al comienzo de la tercera parte de la Escritura: los Escritos (Ketubim).

Con relación a lo que sigue, los Salmos, con sus cinco libros, representan lo que es la Ley en relación con los Profetas: lo esencial. La Escritura es una colección pero su orden no es arbitrario. La sucesión de los libros está estrictamente indicada y es imposible separarlos los unos de los otros. Los Proverbios y Job son la continuación de los Salmos, así como Isaías es la continuación de los Reyes.

3.4. En los Salmos mismos, la sucesión de los cinco libros (de que consta el Salterio) no es tampoco fruto del azar. El Salterio es una obra completa y sus divisiones sugieren una lectura ordenada, que comienza con el primer Salmo y termina por el ciento cincuentésimo.

La cuestión concerniente a los autores del Salterio y la fecha de composición son falsos problemas, como tantos otros que hormiguean en las investigaciones extravagantes conocidas por el nombre de ciencia bíblica o de crítica bíblica. Si no es David, el padre de Salomón, el que compuso los Salmos, es David el rey-Mesías, quien los cantó. El Salterio es obra de Israel. Su fecha es la fecha en la que le plugo componerlo. Todo el resto interesa solamente a un pequeño grupo de tontos que se dicen sabios, como si la ciencia consistiera en perder la vida en futilidades.

3.5. El libro de los Salmos es una sinfonía donde cada Salmo tiene su lugar y cada palabra su significación. Las repeticiones  son múltiples y voluntarias, - así aparecen constantemente motivos ya conocidos en este canto del hombre a la gloria de Dios.